En una sentencia histórica publicada el 22 de abril, el Tribunal Superior de Dominica despenalizó las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo. Dominica se convierte así en el cuarto país del Caribe Oriental que deroga disposiciones legales discriminatorias y despenaliza las relaciones homosexuales, tras Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves y Barbados.
La Ley de Delitos Sexuales de Dominica castigaba la "sodomía" con hasta 10 años de prisión y el tribunal podía «ordenar que el condenado fuera ingresado en un hospital psiquiátrico para recibir tratamiento». La "indecencia grave" se sancionaba con hasta cinco años de prisión. Se entendía que ambas disposiciones penalizaban las conductas sexuales consentidas entre personas del mismo sexo y eran reliquias de la legislación colonial británica.
Aunque las leyes que penalizan la intimidad entre personas del mismo sexo en el Caribe rara vez se aplican, son amplias, están redactadas vagamente y sirven para legitimar los prejuicios y la hostilidad hacia las personas lesbianas, gais, bisexuales y transgénero (LGBT). Un informe de Human Rights Watch de 2018 documentó la discriminación, la violencia y los prejuicios contra las personas LGBT en siete naciones insulares del Caribe Oriental, incluida Dominica, que criminalizaban el sexo entre personas del mismo sexo.
En su sentencia de esta semana, el tribunal sostuvo que las disposiciones de la Ley de Delitos Sexuales violaban la Constitución de Dominica, en concreto "el derecho a la libertad, la libertad de expresión y la protección de la intimidad personal", y respaldó sus argumentos basándose en la jurisprudencia internacional sobre despenalización.
Esta sentencia histórica se produce tras los esfuerzos de grupos de la sociedad civil locales y regionales para impugnar la legislación contra las personas LGBT en el Caribe Oriental, encabezados en parte por la Alianza del Caribe Oriental para la Diversidad y la Igualdad.
En el Caribe anglófono, el Tribunal Supremo de Belice se convirtió en 2016 en el primero en declarar inconstitucionales las leyes que penalizaban la intimidad entre personas del mismo sexo. El Tribunal Superior de Trinidad y Tobago siguió su ejemplo en 2018.
Aun así, cinco países del Caribe -Granada, Guyana, Jamaica, Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas- tienen versiones de las leyes de "sodomía" e "indecencia" en los libros, lo que los convierte en casos atípicos en el hemisferio occidental, donde todos los demás países han despenalizado las conductas homosexuales.
La penalización de las conductas homosexuales viola las normas internacionales, incluido el derecho a la protección frente a injerencias arbitrarias e ilegales en la vida privada y familiar y en la reputación o la dignidad de la persona, como ha subrayado el experto independiente de las Naciones Unidas sobre orientación sexual e identidad de género.
La sentencia de Dominica debe recordar a los gobiernos de la región y de fuera de ella que la defensa de las libertades individuales, incluidas las de las personas LGBT, refuerza el Estado de derecho para todos, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.